Cuando el sol brilla, recibimos 2 tipos de rayos UV en la superficie de nuestra piel:
LOS RAYOS UVB:
- representan el 5% del espectro UV
- son responsables de efectos visibles como el bronceado o las quemaduras solares.
LOS RAYOS UVA:
- representan el 95% del espectro UV
- penetran profundamente en las capas de la piel
- son responsables de efectos invisibles como el estrés oxidativo y la disminución de las defensas inmunitarias de la piel que conducen a efectos visibles como el envejecimiento cutáneo y los cánceres de piel.
Para evitar estos efectos y en lugar de sobrecargar la piel con filtros, BIODERMA ha creado la patente SUN ACTIVE DEFENSE, una protección solar de alta tecnología, reforzada contra los rayos UVA. Combina 4 (y sólo 4) filtros UV y una protección biológica que mejora la capacidad de defensa de la piel para ofrecer de forma duradera y segura bajo el sol:
77% de protección antioxidante (1)
96% protección del ADN (1)
El nuevo ANTI-OX ACTIVE está inspirado en las capacidades naturales de autodefensa de las cianobacterias, un microorganismo presente en el microbioma cutáneo. Este innovador ingrediente aporta una acción antioxidante 10 veces más potente que la vitamina E. Así, refuerza las capacidades naturales de autodefensa de la piel frente a los rayos UV para prevenir los daños celulares y el fotoenvejecimiento.